Las investigadoras del CIBEROBN Nancy Babio y Mercedes Gil, de la Universitat Rovira i Virgili y la Universidad de Córdoba respectivamente, coordinan el estudio CORAL, que se llevará a cabo en siete ciudades de España para prevenir dolencias futuras y controlar el estado de la salud de los niños y niñas.
De qué manera la alimentación, el estilo de vida, las horas de sueño y el entorno afectan, desde muy pequeños, la salud de las personas. Es el objetivo del estudio observacional CORAL, un trabajo que hará el seguimiento de 2.300 niñas y niños durante diez años. Así, con el control de los niños, se pretende especificar la incidencia de determinadas enfermedades—por ejemplo, la obesidad—, en función de la exposición a diferentes factores de riesgo: alimentación, fraccionamiento de las comidas, actividad física o sedentarismo, entre otros.
Todas estas variables serán fundamentales para entender un problema multifactorial, como es la obesidad. Estudiarlo en conjunto es básico para establecer estrategias eficaces de prevención que puedan paliar las consecuencias. Este estudio lo coordinan las investigadoras Nancy Babio y Mercedes Gil, con la participación también de Jordi Salas-Salvadó, jefe de grupo del CIBEROBN y responsable de la Unidad de Nutrición Humana de la URV-IIPSV. Conforman un grupo multidisciplinario con profesionales de la dietética y nutrición, pediatría, enfermería y biología, lo que permitirá tener una visión amplia de los determinantes que se quieren identificar.
Será el primer estudio en esta franja de edad que se hace de manera coordinada y siguiendo el mismo protocolo en las siete ciudades españolas en las que se llevará a cabo. Incluye inicialmente a niños y niñas de 3 a 6 años de Córdoba, Zaragoza, Santiago de Compostela, Valencia, Pamplona, Barcelona y Reus a los se les realizará un seguimiento durante una media de diez años con recogida de información anual. En las comarcas de Tarragona el estudio ha empezado con más de 80 niños y niñas de Riudoms, y se sigue realizando la captación para poder llegar a los 450 voluntarios, sobre todo de las zonas de Reus, la Selva del Camp y Cambrils.
Los resultados del trabajo tienen que proporcionar los datos necesarios para entender y poder actuar sobre los determinantes de los problemas de salud infantiles y posteriores, así como de la extensión de la obesidad y el sobrepeso infantil. Además, a través del largo periodo de seguimiento, habrá una gran cantidad de información sobre los estilos de vida y los hábitos alimentarios de los participantes que se librarán a los padres para que puedan tener una información detallada de la salud de sus hijos.
El proyecto se encuentra en fase de reclutamiento y de evaluación de los candidatos. El proceso que se sigue es el siguiente: primero se seleccionan a los candidatos, después se les hace una visita con cuestionarios y se recogen muestras biológicas que servirán para incluir a los participantes en el proyecto. A partir de aquí, se hará una observación anual durante diez años con cuestionarios sobre el estilo de vida, el seguimiento de la dieta mediterránea y también un control general con medidas antropométricas de los niños y diferentes pruebas de condición física, etc. Esto supondrá una visita al año en los centros de atención primaria por cada participante, que complementará la información de su estado de salud y servirá, también, a su pediatra y enfermero.
El estudio lo realizarán grupos de nutrición y de pediatría que forman parte del CIBEROBN. En la Universidad Rovira i Virgili el estudio lo impulsa la Unidad de Nutrición Humana con la colaboración de la Unidad de Pediatría del Departamento de Medicina y Cirugía de la Universitat Rovira i Virgili.